El cumple

                                                                                                                                                

Casi nunca escribo sobre cosas que me pasan ya que cuando decidi hacer un blog personal no lo concebi como un blog – diario donde escribir mi vida. Concebi mi blog como un espacio donde expresarme por escrito y poder compartir mis pensamientos, emociones o sentimientos con la gente que quiera poder participar en ellos. Sin embargo, hoy voy a hacer una excepcion. Voy a hablar de mi fin de semana. Bueno, mas bien de mi “Sabado en Bilbao”. 

Fui a Bilbao el sabado por la mañana para un acontecimiento en particular: el cumpleaños de C. Desde hace unos meses a esta parte, he retoma

do el contacto con C y me alegro de decir que, despues de unos años sin estar en contacto frecuente, puedo contar c

on ella como una buena amiga. Y es estupendo tener una amiga que te conoce tan bien, y con quien vivistes momentos bonitos de tu juventud.  El caso es que aterrize en un lluvioso Bilbao a las 13:00 y mi primo P., que es un cielo de primo, me recogio en el aeropuerto y fuimos a comer a casa de su madre. A. es una mujer estupenda. Siempre te acoge con los brazos abiertos. La casa de A. estaba llena. Sus nietos I. y L, su hija L, su hija S. y su marido P. estaban ya alli cuando mi primo y yo llegamos. Luego mi primo fue a buscar a su chica con lo cual el 

numero de bocas a alimentar casi llegaba a la decena. Comimos una estupenda sopa de cocido como la que no habia probado en años, garbanzos y pollo asado con pimientos. Todo estaba buenisimo. Y esque como me gusta la sopa de cocido... Despues de comer estuvimos jugando con los sobrinos de mis primos. Que trastos... claro que me han hecho recordar lo mucho que algun dia me gustaria tener  a mi algun trasto asi que me diera a mi “guerra” en casa y me alegrara los domingos. Casi dos horas antes de la hora a la que habiamos quedado con C fuimos a casa de P. y D. y nos cambiamos y preparamos para salir. Fuimos primero a El Corte Ingles, ya que P. se habia comprado un miniordenador y queria comprarse una bolsa para llevarlo. Miramos en todas las secciones imaginables pero al final solo encontramos una que era barata y no muy sofisticada ni de excesivamente buena calidad pero que para “salir del paso” servia. Claro, llegamos tarde. Y como “jarreaba”... y esque parece que cuando llueve tanto ademas si llegas tarde parece que aun llegas mas tarde. 

Encontramos el bar de “los champis”. Ahi habia estado yo en mis ultimas fiestas de Bilbao con D (no la novia de mi primo, sino D. la rubia). Que por cierto, ponen unos “pintxos” de champiñones que estan para chuparse los dedos, dos veces. Ahi estaba C. con su nuevo corte de pelo y un vestidito rojo muy mono y junto a R. . R se fue y nos quedamos solo la C, mi primo P, su novia D y amigos de C que yo no conocia, excepto S y su marido al que me habian presentado hace un rato. Antes de que el chico de los ojos bomitos se fuera le di los regalos a C. que le encantaron. Aunque no cogiera el “sentido” del regalo principal hasta un poco mas tarde. Fuimos de “Kalimotxos” y me encanto por dos razones: 

1. Hacia siglos que no salia de “Kalimotxos”, una de mis bebidas favoritas, que es dificil que te pongan en Madrid.

2. Me gaste menos de la mitad de lo que me hubiera gastado en la capi si hubiera ido a cervezas. 

Y esque, salir “de tragos” y “de pintxos” es todo un lujo. Debo hacerlo mas a menudo. Debemos... ¿eh, C? Porque en Madrid puedes salir “de tapas” y “de cañas” pero no es lo mismo que salir “de tragos” y “de pintxos”. No es lo mismo. 

Seguimos y seguimos... hasta que ya no quedaba nadie en Barrenkalle ( la arteria principal de “martxa” del Kasko Viejo de Bilbao). Entre tragos hablamos de niños y de la manera de gestarlos y me di cuenta de que C y yo nunca podriamos haber llegado a buen puerto porque ella no es de niños y yo soy muy niñero. Llego la hora de decidir donde se iba. Yo propuse el “Baudulake”, porque hacia siglos que no estaba en un bar de ambiente en Bilbao, y porque me apetecia. La idea fue secundada y ahi acabamos. C, S, su marido y yo. Que por cierto, esto confirma mi teoria de que se puede estar casado y salir de vez en cuando de “martxuki”. Y sino que se lo digan a S. y a I. (el marido de S.). Ambos me cayeron fenomenal. Y la noche se acabo. La estancia en el Baudulake me supo a poco, pero claro, lo dejamos para lo ultimo... ¿Porque siempre dejamos lo ultimo para el final? Como los postres. Qizas si nos comieramos el postre al principio luego no querriamos mas, y seria muy beneficioso en todos los sentidos. Pensarlo, tiene sentido. 

Y eso fue todo el sabado en Bilbao. Hoy me he levantado, aeropuerto y Londres via Madrid. Y en breve a la cama... Eso si, en mi visita de 24 horas no me dio tiempo a ver ni a mi amigo R. al que hace 8 años que no veo, ni a mi hermana. Tengo que volver. Sera en Mayo para la boda que tengo en Basauri. Y aprovechare para ver a la gente que no he visto, a mi amiga C, ir de “tragos” y “pintxos” . 

Hasta entonces, gero arte !!