16 febrero 2006

Los efectos de "Rita"


Hoy voy a volver a hablar de Nueva Orleans, pero de un Nueva Orleans muy diferente. Voy a hablar del Nueva Orleans destrozado por "Rita", la tormenta-huracán que azotó la ciudad en los últimos meses del año pasado. Siempre oyes de ciudades que han sido "arrasadas" o destrozadas por diferentes fenómenos naturales pero nunca crees poder llegar a verlo con tus propios ojos. Todos tenemos en mente las horribles imágenes del "Tsunami" las navidades del 2004 o más recientemente los efectos provocados por "Vilma" en Cancún hace unos meses. Pues bién, en cuanto al primer desastre natural, yo estaba en Sri Lanka hasta unos días antes de que sucediera. Una vez en Londres unos días más tardes vi en la televisión la gran "catástrofe" que sacudió Thailandia y la propia Sri Lanka. Lo de "Vilma" me llegó aún más cerca. Estaba en Orlando cuando el huracán "desplegaba" toda su furia en las costas mejicanas. Como ya dije en un blog anterior tuvimos que subir a Mérida (Méjico) a recoger a la tripulación evacuada de Cancún. Habían perdido todo y pasado varios días sin tener nada que comer. Luego vino "Rita". Este último lo seguí todo por televisión, y nunca pensé que tan solo unos meses más tarde iba a poder ir a contemplar los destrozos en persona. Asi ha sido, el día 7 llegué a Nueva Orleans (ver blog del día 11/02/06) y ví lo bonito y lo feo. Lo bonito, la ciudad. Su zona del "French Quarter", su "plaza Jackson", su "french market"... Lo feo, los efectos causados por la popular "Rita". Los barrios residenciales cercanos al dique que se rompió estaban totalmente "arrasados". La mayoría de las casas estaban en ruinas, con tejados levantados, estructuras deformadas... Nos llevaban en coche por las calles afectadas y cuanto más avanzábamos más terribles eran los daños que observábamos. Había calles con arboles derrumbados cortando la carretera, casas levantadas de sus cimientos... Las calles parecían pertenecer a pueblos fantasmas donde nadie había nunca vivido antes. Todas las casas estaban inhabitadas, algunas tenían sus puertas abiertas y se podía ver el más completo vacio en su interior. Era un paisaje desolador. Fue muy triste ver como tras varios meses del terrible fenómeno aquella bonita ciudad tenía gran parte de sus calles en tal estado. Esta vez si pude comprobar "de cerca" los efectos desastrosos de uno de estos fenómenos y, la verdad, sólo entonces puedes entender la magnitud y la fuerza de estos. Sólo queda esperar que tarde mucho tiempo en suceder algo así de nuevo y que si sucede provoque las menos víctimas mortales posibles.

*Dedicado a todos los habitantes de Nueva Orleans que sufrieron en medida directa o indirecta los efectos de "Rita".

** En la foto, una de las instantaneas tomadas de una de las casas afectadas.

Peter

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